ELIDES J. ROJAS L. | EL UNIVERSAL
Muy extraña esta parte previa a la campaña electoral para las parlamentarias 2015 del 6 de diciembre. El CNE dijo claramente que no permitirá que funcionarios intervengan haciendo uso del poder que implica tener miles de opciones para transmitir sus promesas y ofertas en detrimento de las posibilidades de quienes están muy lejos del presupuesto y del poder. Claro que no se cumple. No obstante, eso no es lo raro de esta campaña. Algunas rarezas son las de siempre y otras son nuevas. Veamos. No ha empezado la campaña oficialmente. Lo que sí comenzó es lo que los venezolanos llaman "la misma broma de siempre". La palabra es otra, obviamente. Pero no somos doctores honoris causa de la bolivariana. Es así como desde hace varias temporadas se cruzan dos formas de ver las elecciones a partir de un CNE que genera desconfianza y es asociado más a la trampa que a la transparencia. Es un asunto que envuelve realidades y mitos. Se configura con trampas reales y mucha propaganda generadora de desconfianza. Y, al final, reaparece el fantasma de la falsa alternativa. Voto o no voto. Si voto me roban el voto y convalido el fraude. Si no voto dejo mi espacio libre para que el chavismo haga lo que quiera. Y si no lo hace, de todas maneras tiene un voto menos en contra. Pero esta disyuntiva es de fondo y al continuismo le funciona perfectamente. CLIC AQUI para seguir leyendo...
Recibe nuestras actualizaciones por E-Mail. SUSCRÍBETE GRATIS AQUI
Twittear |