DÁMASO JIMÉNEZ | EL UNIVERSAL
A Maduro no le gusta que lo subestimen, pero la verdad es que aún no ha demostrado el talante necesario que requiere un estadista para dar respuestas claras a problemas álgidos como la escasez, el desabastecimiento, la inflación, la corrupción y el narcotráfico. Ni siquiera vale la pena dedicarle unas líneas a la desesperada y simplona fórmula tan cacareada por sus asesores cubanos, de señalar a una burguesía que sólo existe bajo el cobijo de sus alas y a supuestas operaciones de espionaje e inoculaciones de crisis y sabotaje económico que sólo podrían existir en mentes retrógradas e ignorantes propias de todo comunista trasnochado. Lea el Artículo Completo AQUI ...