Marianella Salazar / El Nacional
Nicolás Maduro superó al comandante eterno, que pasó 14 años amenazando e insultando a Estados Unidos y no logró lo que su pupilo consiguió en solo dos años: que el imperio nos reconozca como su enemigo por ser “una amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos”. Ahora tiene la gran excusa para atornillarse con poderes extraordinarios otorgados por la sumisa Asamblea Nacional a través de una Ley Habilitante y culpar a la Casa Blanca, el Pentágono, la CIA, el FBI, la DEA y a los Yanquis de Nueva York del fracasado modelo revolucionario, de la economía ineficiente y de que la población este dedicada a la supervivencia en medio de un amplio mercado negro. CLIC AQUI para seguir leyendo...
Recibe nuestras actualizaciones por E-Mail. SUSCRÍBETE GRATIS AQUI
Twittear |